Aunque febrero no es mi mes mas querido, festejo que haya terminado un enero de grandes esfuerzos para seguir adelante.
Como si recién ahora pudiera pensar los típicos deseos o promesas que el resto hace a fin de cada año, yo solo me planteo para esta nueva etapa, que lo urgente no nuble lo importante, que la solemnidad no opaque mi sonrisa y que el miedo no derrita mis pasiones...
Por más ideas que no queden en el aire y se conviertan en Acciones (y por favor!) que las acciones se conviertan en revoluciones!
Va regalito para robarles una sonrisa
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